Hace varios meses me invitaron a dar una charla a la Asociación de comerciantes del distrito de Chamberí. Uno de los datos aportados por los políticos que introdujeron la charla, fue que apenas un 50% de los comerciantes tenían una web y de los que las tenían, que apenas a nadie le servía de nada… que les había hecho la web un conocido y ahí estaba…
Una web tiene que convertir. Convertir es conseguir aquello que quieras de tu web: vender, leads, contactos, solicitudes de información, de cita, de visita, etc., pero algo.
Y este es el primer paso: define para qué quieres tu página web.
Y después de eso, asegúrate de cumplir los siguientes mínimos:
En cuanto a la parte más técnica del sitio, debe tener un mínimo tiempo de carga, compatibilidad con navegadores que hay en el mercado más allá de internet Explorer y adaptación a diferentes resoluciones.
En la parte de diseño, en principio hay que tratar intentar que todo sea muy claro, muy fácil de ver, con equilibrio imágenes y texto y preferiblemente fondo blanco. El contenido estructurado en bloques de información, con epígrafes claros. Y por último es especialmente importante para las web cuyo objetivo es vender, contar con un buscador interno de productos y servicios.
Estos son los mínimos y sobre estas bases se puede empezar a construir un sólida estrategia online para la empresa.
Pablo Rueda. Director de belou, Marketing y Comunicación. Imparte los Cursos belouCamp. http://about.me/prueda
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